Es el riesgo de tipo de interés derivado que afecta a los retornos de capital y percepción de ingresos por rentas cuando el inversor pretende mantener la rentabilidad de los capitales hasta el final de la inversión. Es evidente que puede no colocar los fondos que le retornan al mismo tipo de interés que inicialmente consiguió y que la reinversión del cupón o renta también puede rendir menos por el mismo motivo.