En operaciones bancarias, en las que en su cálculo se puede emplear bien la base de año natural (365 días) o la base de año comercial (360 días), el cambio de una por otra. Hay que tener en cuenta que cualquier cambio en las condiciones de cálculo de intereses acreedores o deudores implica un cambio en las condiciones del contrato que previamente firmaron entidad financiera y cliente, por lo que cualquier modificación ha de notificarse con antelación a los clientes afectados.