Concepto
La prima de riesgo es un procedimiento que permite utilizar los métodos clásicos de valoración de inversiones en aquellos casos en los que el proyecto analizado tenga riesgo. Consiste en añadir una prima al tipo de descuento utilizado en caso de que se consideré que la citada inversión tiene riesgo. Por tanto, se sustituye el tipo de descuento "k" o rentabilidad mínima que se exige a una inversión sin riesgo, por un tipo superior "s" ajustado al riesgo, que se obtiene como la suma del tipo de descuento sin riesgo más la prima "p". Así, el nuevo tipo de descuento es:
s = k + p.
Por tanto, mientras a una inversión que se considera segura (como la adquisición de títulos con la garantía del Estado, o la realización de un proyecto que ya se ha efectuado en ocasiones anteriores) se le exige una rentabilidad "k", a inversiones más arriesgadas (como la relativa a un producto novedoso) se le exigirá una rentabilidad superior "s". Está rentabilidad se obtiene sumando a "k" la prima de riesgo "p". En definitiva, se trata de un sistema para "penalizar" aquellas inversiones consideradas con riesgo con respecto a las que parecen más seguras. El gran inconveniente de este procedimiento es la subjetividad a la hora de determinar la prima aplicable a cada proyecto. Algunas empresas agrupan sus inversiones en diferentes niveles de riesgo, asignando un valor de "p" a cada uno de ellos; aunque sigue existiendo un elemento de subjetividad.
Aplicación de la prima de riesgo a los métodos de valoración de inversiones
La aplicación de la prima de riesgo es diferente en función del método de valoración que se utilice. Seguidamente se analiza para el Valor Actualizado Neto (VAN) y para la Tasa Interna de Retorno (TIR).
Aplicación de la prima de riesgo al VAN
El VAN mide la rentabilidad en términos absolutos de una inversión mediante la diferencia de los cobros y pagos actualizados de la misma. Si se considera que el proyecto analizado tiene riesgo y se le aplica una prima, es necesario utilizar el tipo de descuento ajustado al riesgo "s" para actualizar los flujos de caja, ya que esta es la rentabilidad mínima que se exige a la inversión.
O lo que es lo mismo:
Siendo:
- — A: Desembolso inicial de la inversión.
- — Qj: Flujo de caja de la inversión en el período "j" (j = 1, 2, ..., n).
- — K: Rentabilidad exigida a una inversión sin riesgo.
- — P: Prima de riesgo asignada a la inversión analizada.
- — S: Rentabilidad ajustada al riesgo de la inversión (s = k + p).
Al utilizar un tipo de descuento mayor, el VAN obtenido es más pequeño, siendo efectuable siempre que sea mayor que cero y siendo preferibles aquellas inversiones con mayor VAN, ajustadas cada una con su propia prima de riesgo.
EJEMPLO:
— Una inversión supone un desembolso inicial de 120 y unos flujos de caja de 40, 40 y 60 en los tres años siguientes (en miles de euros). Si la empresa aplica a los proyectos habituales un tipo de descuento del 6 %, determinar si la inversión es efectuable según el VAN.
Por tanto, según el VAN la inversión es efectuable (> 0).
— Si se considera que el proyecto anterior tiene riesgo, el inversor exigirá una rentabilidad mayor para considerar que es efectuable. Suponiendo que exigen un 4 % adicional, determinar si el proyecto sigue siendo efectuable.
Utilizando el nuevo tipo de descuento obtenido, sumando k y p (s = 6 + 4 = 10 %), el valor del VAN es:
Como el VAN es negativo la inversión no es efectuable.
Aplicación de la prima de riesgo a la TIR
La TIR determina la rentabilidad, en términos relativos, obtenida con una inversión. Si se considera que la inversión no tiene riesgo la condición que se exige para ser aceptada es que esa rentabilidad supere a la exigida "k" (TIR > k). En cuanto al cálculo de la TIR no hay modificaciones, realizándose de la forma siguiente:
En caso de que se considere que el proyecto tiene riesgo y se le asigne una prima "p", la rentabilidad exigida será ahora mayor que "s", por lo que la condición para que la inversión sea efectuable es que la TIR sea mayor que "s" (TIR > s = (k + p)).
En cuanto a la elección entre dos inversiones (jerarquización) con distinto riesgo, el criterio a emplear consiste en seleccionar la que tenga mayor diferencia entre su TIR y su prima de riesgo (TIR - p). Así, si se analizan dos inversiones (X y Z) con la misma TIR (12 %) y las siguientes primas de riesgo: para "X" es del 4 % (px = 4 %) y para "Z" del 6 % (pz = 6 %). Al elegir entre ambas según la TIR hay que comparar:
(TIRx - px) = (12 - 4) = 8 % con (TIRz - pz) = (12 - 6) = 6 %
Comparando ambos valores la mayor diferencia corresponde a la inversión "X". Por tanto, la inversión "X" es preferible ya que si ambas inversiones tienen la misma TIR es mejor la que tiene menor riesgo.
EJEMPLO:
— Tomando como referencia la inversión del ejemplo analizado en el VAN, determinar si es efectuable según la TIR si se considera que no tiene riesgo.
Por tanto, según la TIR la inversión es efectuable, ya que la rentabilidad lograda (7,55 %) es superior a la exigida (6 %).
— Siguiendo con la misma inversión, determinar si la inversión anterior sigue siendo efectuable según la TIR si se le aplica una prima de riesgo del 4 %.
En este caso no es necesario volver a calcular la TIR, pero a la hora de determinar la efectuabilidad del proyecto la referencia que la inversión debe superar será la rentabilidad ajustada al riesgo (s = k + p), que en este caso es del 10 % (6 + 4 = 10). Como la TIR es inferior (7,55 %), la inversión no sería efectuable según este criterio.
— Si se quiere comparar la inversión anterior con otra, con una TIR del 8 % y con una prima de riesgo del 5 %, se observa:
Si no se tuviera en cuenta el riesgo sería preferible la segunda inversión ya que: (8 > 7,55). Al incluir el riesgo se compara la diferencia entre las TIR y las primas. Para la primera inversión se obtiene: (7,55 - 4 = 3,55 %), mientras que para la segunda (8 - 5 = 3 %). Por tanto, es preferible la inversión inicial.
Recuerde que...
- • La aplicación de la prima de riesgo es diferente en función del método de valoración que se utilice.
- • El VAN mide la rentabilidad en términos absolutos de una inversión mediante la diferencia de los cobros y pagos actualizados de la misma.
- • La TIR determina la rentabilidad, en términos relativos, obtenida con una inversión.
- • El gran inconveniente de este procedimiento es la subjetividad a la hora de determinar la prima aplicable a cada proyecto.
- • Algunas empresas agrupan sus inversiones en diferentes niveles de riesgo, asignando un valor de prima a cada uno de ellos.