Concepto
La teoría de los contratos implícitos hace referencia a que la relación entre empresarios y trabajadores se rige, además de por los contratos “explícitos” de carácter legal firmados entre ambos, por multitud de compromisos tácitos establecidos durante el entendimiento entre las dos partes. Los contratos implícitos son acuerdos no escritos y normas informales que tienen las empresas con sus trabajadores, y que, en muchos casos, se justifican en el compromiso de estabilidad de los salarios. En esta teoría, las empresas fijan los salarios dentro de una estrategia amplia y de largo plazo o de estabilidad de la relación de empleo.
Rigidez salarial
Esta teoría surge a mediados de los años setenta como una de las primeras reacciones a la escuela clásica de expectativas racionales y supuso el reconocimiento del carácter incompleto que caracteriza a los contratos de trabajo. La teoría de los contratos implícitos fue desarrollada por Azariadis en 1975.
En general, es una teoría que puede ayudar a explicar la rigidez de los salarios reales, aunque no tanto las fluctuaciones del empleo. Concretamente esta teoría introduce dos explicaciones a la rigidez salarial a la baja. Por un lado, se considera que los asalariados tienen una aversión al riesgo mayor que la de los empresarios, por lo que las empresas, al disponer de mayor capacidad financiera para asumir el riesgo de las fluctuaciones económicas, ofrecerán a sus trabajadores un seguro ante las situaciones adversas: pagarán a sus empleados unos salarios promedio constantemente inferiores a los de equilibrio en etapas expansivas y superiores a los de las etapas recesivas.
Al partir de la idea de que los trabajadores tienen una mayor aversión al riesgo que los empresarios, ambas partes intercambian riesgo y salario, lo que se traduce en que los trabajadores aceptan un salario inferior al valor de su producto marginal a cambio de mayor estabilidad de ingresos y empleo en las diferentes fases del ciclo económico.
Por otro lado, este comportamiento solo surgirá cuando las relaciones entre trabajadores y empresa posean un carácter de largo plazo. De esta manera, el empresario manifiesta un interés por mantener a los trabajadores que han adquirido una formación determinada, que resultaría costosa de sustituir. Con estas explicaciones se pone de manifiesto que la relación de trabajo va más allá de la mera prestación de servicios (hay una vinculación duradera entre la empresa y los asalariados) de manera que las empresas, al establecer los salarios, tienen en cuenta la relación futura y a largo plazo del empleo. Se plantea así un salario que no siga en cada momento las evoluciones de la coyuntura económica, por lo que el salario no se ajusta en cada momento atendiendo a la productividad marginal, sino que será a largo plazo cuando esto suceda.
Por último, señalar que esta teoría no sirve para explicar las fluctuaciones del empleo, ni el motivo por el que las empresas no pagan salarios más bajos a los nuevos trabajadores cuando el desempleo es persistente y elevado. En este último caso se cree que, en ocasiones, podría aparecer una hostilidad de los trabajadores antiguos hacia los nuevos.
Información asimétrica
En definitiva, un rasgo importante de la teoría es descartar el supuesto de información perfecta, introduciendo tanto la incertidumbre como la información asimétrica. La mayor aversión al riesgo de los trabajadores es un componente importante del contrato implícito que privilegia un salario rígido en condiciones de información asimétrica sobre el desempeño de la empresa. Por este motivo, la diferencia entre el salario y el valor del producto marginal se entiende como un pago al empresario por el riesgo asumido, de forma que, al haber una relación de empleo duradera, los salarios no siguen en cada momento la senda de la productividad marginal, sino que al final del período se habrán compensado los desajustes y el salario corresponderá a la productividad marginal.
Recuerde que...
- • Los contratos implícitos hace referencia a que la relación entre empresarios y trabajadores se rige, además de por los contratos “explícitos” de carácter legal firmados entre ambos, por multitud de compromisos tácitos establecidos durante el entendimiento entre las dos partes.
- • La teoría de los contratos implícitos puede ayudar a explicar la rigidez de los salarios reales, aunque no tanto las fluctuaciones del empleo.
- • Un rasgo importante de la teoría es descartar el supuesto de información perfecta, introduciendo tanto la incertidumbre como la información asimétrica.