¿Qué es la coordinación de actividades empresariales?
La prevención de riesgos laborales consiste en desarrollar una acción permanente de identificación, evaluación y control de los riesgos laborales. (Véase: Evaluación de riesgos laborales). Para ello, las empresas se dotan de una estructura organizativa, con funciones y prácticas definidas, y procedimientos para la participación de los trabajadores. Esto no estaría completo sin un sistema para controlar los resultados de estas actividades.
La normativa establece que cuando diversas empresas comparten un centro de trabajo, el empresario principal tiene un deber de vigilancia del cumplimiento de la normativa preventiva respecto de las empresas contratistas y sus subcontratas. Para ello, debe llevar a cabo la coordinación de actividades empresariales.
También se establecen medidas para asegurar que se pueda ejercer el derecho de la representación de todos los trabajadores para exigir medidas de prevención contra los riesgos laborales existentes.
¿Cuál es la normativa de aplicación a la CAE?
El cumplimiento por las empresas de la normativa contenida en el Real Decreto 171/2004, de 30 de enero, sobre coordinación de actividades empresariales, que viene a desarrollar el artículo 24 de la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales (LPRL), puede suscitar ciertas dudas a la hora de aplicar esta normativa a situaciones específicas, en las que no siempre están bien definidas las obligaciones del empresario.
El desarrollo del artículo 24 de la mencionada Ley de Prevención de Riesgos Laborales supone un nuevo paso para reforzar la seguridad y salud en el trabajo en los supuestos de concurrencia de actividades preventivas empresariales en un mismo centro de trabajo, es decir, en los casos en que una empresa subcontrata con otras la realización de obras o servicios en su centro de trabajo, reconociendo a dichos delegados de prevención o, en su defecto, a los representantes de los trabajadores unos derechos.
El intercambio de información para la coordinación se tendrá que realizar siempre que cualquier operario de la empresa acceda a otros centros de trabajo o bien, cuando cualquier trabajador de otra empresa (incluidos los autónomos) accedan a nuestro centro de trabajo.
La información deberá ser suficiente y deberá proporcionarse antes del inicio de las actividades, cuando se produzca un cambio en las actividades concurrentes que sea relevante a efectos preventivos y cuando se haya producido una situación de emergencia.
La obligación de coordinación entre empresas y trabajadores autónomos que concurran en un mismo centro de trabajo viene definida en el artículo 24 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
Hay muchos sectores productivos, como es el caso de la construcción, en los que la subcontratación es habitual y en donde la siniestralidad laboral es muy elevada, por lo que los poderes públicos consideraron necesario y conveniente desarrollar y concretar mejor el contenido de este artículo 24, aprobándose el Real Decreto 171/2004, de 30 de enero, que cumple esta finalidad.
En el Real Decreto se nombra sobre todo a los trabajadores autónomos, con el fin de resaltar la necesidad de que se integren en las actividades de coordinación que se desarrollen en el centro de trabajo en el que estén actuando.
Dicho artículo 24 establece que todos los empresarios, cuyos trabajadores coincidan en un mismo centro de trabajo, tienen el deber de cooperación entre ellos.
El Real Decreto 171/2004, de 30 de enero, extiende esta obligación también a los trabajadores autónomos y añade que la obligación de cooperación entre unos y otros existe aunque no haya relación jurídica entre ellos.
A los efectos de lo establecido en este Real Decreto, se entiende por:
- — Centro de trabajo: Cualquier área, edificada o no, en la que los trabajadores deban permanecer o a la que deban acceder por motivo de su trabajo.
- — Empresario titular del centro de trabajo: Es la persona que tiene la capacidad de poner a disposición y gestionar el centro de trabajo.
- — Empresario principal: Es el empresario que contrata o subcontrata con otros la realización de obras o servicios correspondientes a la propia actividad de aquel y que se desarrollan en su propio centro de trabajo.
A partir de aquí, este Real Decreto establece diferencias entre las obligaciones de los diferentes actuantes en el centro de trabajo:
- 1. Obligaciones del empresario titular del centro (es el que tiene capacidad de poner a disposición y gestionar el centro de trabajo):
- 2. Obligaciones del empresario principal (se es principal, respecto de un contratista o subcontratista, cuando ambos son de la misma actividad):
- a) Respecto a quienes dependan de él, tiene las mismas obligaciones que el empresario titular del centro de trabajo.
- b) Deberá vigilar el cumplimiento de la normativa de prevención por parte de quienes dependan de él.
- c) Deberá exigirles que acrediten por escrito el haber realizado una evaluación de riesgos y un plan de medidas para los trabajadores contratados.
- d) Deberá exigir la acreditación de que los trabajadores han recibido la adecuada formación.
¿Cuáles son las características de la CAE?
Según el artículo 24 de la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales, las principales características de la CAE son:
- • Intercambio de Información: las empresas concurrentes deben intercambiar información sobre los riesgos específicos de sus actividades y las medidas de prevención y protección correspondientes. Esto incluye tanto los riesgos propios de cada empresa como los derivados de la concurrencia de actividades.
- • Instrucciones de Seguridad: el empresario principal debe dar instrucciones adecuadas a las empresas contratistas y subcontratistas sobre los riesgos del centro de trabajo y las medidas de prevención y protección a adoptar.
- • Vigilancia del Cumplimiento: el empresario principal tiene la responsabilidad de vigilar el cumplimiento de la normativa de prevención de riesgos laborales por parte de las empresas contratistas y subcontratistas. Esto incluye la supervisión de las medidas de seguridad y salud adoptadas.
- • Medidas de Coordinación: las empresas deben establecer los medios de coordinación necesarios para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores. Esto puede incluir reuniones periódicas, designación de coordinadores de seguridad, y la implementación de procedimientos conjuntos de actuación.
- • Documentación: es fundamental mantener una adecuada documentación de todas las actividades de coordinación, incluyendo los intercambios de información, las instrucciones dadas, y las medidas adoptadas. Esta documentación debe estar disponible para su consulta por las autoridades laborales.
- • Evaluación de Riesgos: las empresas deben realizar una evaluación conjunta de los riesgos derivados de la concurrencia de actividades y adoptar las medidas preventivas necesarias para eliminarlos o reducirlos.
¿Cuál es el objeto de la CAE?
La coordinación de actividades empresariales para la prevención de los riesgos laborales deberá garantizar el cumplimiento de los siguientes objetivos:
- • La aplicación coherente y responsable de los principios de acción preventiva establecidos en la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, por las empresas concurrentes en el centro de trabajo.
- • La aplicación correcta de los métodos de trabajo por las empresas concurrentes en el centro de trabajo.
- • El control de las interacciones de las diferentes actividades desarrolladas en el centro de trabajo, en especial cuando puedan generar riesgos calificados como graves o muy graves, o cuando se desarrollen actividades incompatibles entre sí por su incidencia en la seguridad y la salud de los trabajadores.
- • La adecuación entre los riesgos existentes en el centro de trabajo que puedan afectar a los trabajadores de las empresas concurrentes y las medidas aplicadas para su prevención. (Véase: Adecuación del trabajo a las condiciones personales).
¿Cuáles son los medios para llevar a cabo la CAE?
Posteriormente, el Real Decreto identifica a los llamados “medios de coordinación”, es decir, aquellos recursos que se pueden utilizar en el centro de trabajo para desarrollar la coordinación. Algunos medios de coordinación son:
- • El intercambio de información y la impartición de instrucciones.
- • Las reuniones periódicas.
- • El establecimiento de acuerdos.
- • La presencia en el centro de los llamados recursos preventivos (la Ley 54/2003, de 12 de diciembre, de reforma del marco normativo de la prevención de riesgos laborales, considera recursos preventivos a los que el contratista podrá asignar la presencia: uno o varios trabajadores designados de la empresa; uno o varios miembros del servicio de prevención de la empresa, o uno o varios miembros del o los servicios de prevención ajenos concertados por la empresa).
- • La designación de una persona encargada de la coordinación.
En cumplimiento del deber de cooperación, los empresarios concurrentes en el centro de trabajo establecerán los medios de coordinación para la prevención de riesgos laborales que consideren necesarios y pertinentes.
Al establecer los medios de coordinación se tendrán en cuenta el grado de peligrosidad de las actividades que se realicen en el centro de trabajo, el número de trabajadores de las empresas presentes en el centro de trabajo y la duración de la concurrencia de las actividades desarrolladas por dichas empresas.
Tanto los recursos preventivos como la persona encargada de la coordinación son figuras que aparecen por primera vez en el Real Decreto 171/2004, de 30 de enero, y cuyas condiciones se definen en el mismo.
En lo que se refiere a las obras de construcción, este Real Decreto mantiene la prioridad de lo establecido en el Real Decreto 1627/1997, de 24 de octubre, pero hay que tener en cuenta que en este lo que predomina es la figura del coordinador designado por el promotor, lo cual no impide que las empresas y trabajadores autónomos que trabajan en la obra deban cumplir con los requerimientos del Real Decreto 171/2004, sobre coordinación.
Recuerde...
- • Cuando diversas empresas comparten centro de trabajo, el empresario principal tiene un deber de vigilancia del cumplimiento de la normativa preventiva (CAE), respecto de las empresas contratistas y sus subcontratas.
- • La norma principal es el Real Decreto 171/2004, de 30 de enero, sobre coordinación de actividades empresariales, que desarrolla el art. 24 de la Ley 31/1995, de PRL.
- • Caracterizan a la CAE el intercambio de información, las instrucciones de seguridad, la vigilancia del cumplimiento, las medidas de coordinación, la documentación y la evaluación de riesgos.
- • Los objetivos de la CAE son la aplicación de los principios de la acción preventiva, la aplicación correcta de los métodos de trabajo, el control de las interacciones y la adecuación entre los riesgos y las medidas aplicadas para evitarlos.
- • Los medios para llevar a cabo la CAE son el intercambio de información, las reuniones periódicas, los acuerdos, los recursos preventivos y designar a un coordinador.