Concepto
Son los circuitos o vías a través del cual las entidades financieras ofrecen a sus clientes actuales o potenciales sus productos o servicios.
El canal de distribución tradicional
Tradicionalmente, el canal de distribución bancaria por excelencia ha sido la oficina o sucursal: el banco o caja prestaba sus servicios a sus clientes a través de la misma, requiriéndose una presencia física de ambas partes tanto para realizar operaciones bancarias (por ejemplo, una transferencia), como para formalizar contratos (por ejemplo, una cuenta corriente) o simplemente para solicitar información (sobre productos ofrecidos por el banco o caja).
La importancia tan decisiva de este canal de distribución es lo que ha favorecido una red extensa de oficinas en muchas ciudades y pueblos y las operaciones de adquisición total o parcial (fusiones, compras parciales de red) entre entidades financieras.
En las áreas rurales, además de la oficina o sucursal, ha tenido importancia como canal de distribución complementario el de los corresponsales o colaboradores (ya fuesen bancarios o no bancarios), que, en aquellas zonas a las que las oficinas no llegaban, se encargaban de captar clientes y de facilitarles la realización de operaciones (por ejemplo, el corresponsal llevaba personalmente en mano el contrato de cuenta corriente firmado por el banco, recogía la firma del cliente en el pueblo en el que no existía oficina del Banco X y posteriormente lo entregaba a la entidad).
Los nuevos canales relevantes
En la actualidad, la oficina o sucursal sigue siendo un canal muy importante de distribución bancaria, pero las nuevas tecnologías de información y comunicación (TIC) han propiciado la aparición de otros canales relevantes, para algunos casi sustitutivos de la sucursal, para otros simplemente complementarios:
- a) Internet
La banca electrónica a través de Internet ha supuesto una verdadera revolución. A través de la misma, y en función del grado de desarrollo que tenga en cada entidad, el cliente actual o potencial podrá:
- - Consultar productos y servicios ofrecidos por el banco o caja.
- - Realizar diversas operaciones financieras, siendo muy habitual no solo las de consulta de movimientos y saldos, sino las transferencias, domiciliaciones, etc.
- - Contratar productos: la contratación telemática está teniendo cada vez más importancia, al punto de que muchas entidades financieras están creando productos que exclusivamente se dirigen a este canal de distribución, es decir, que solo pueden contratarse por esta vía.
- b) Tarjetas, cajeros y TPV
Tampoco existe duda de que constituyen un canal de distribución que ha descargado, en cierta medida, de presencia física a las sucursales. Cada vez pueden realizarse más transacciones con las tarjetas (muchas de las cuales incorporan ya chips) y en cajeros automáticos.
- c) Otros canales
El gran desarrollo de las tecnologías de la comunicación e información (TIC) está posibilitando no solo que la actividad bancaria pueda canalizarse a través de Internet, sino que, cada vez más, nos acercamos a la generalización un “terminal móvil” que cumpla funciones de teléfono y ordenador.
En este contexto, la banca puede hacer uso de estas tecnologías y empieza a ser frecuente el empleo del móvil para relacionarse con las entidades financieras. Ejemplos claros los tenemos en la información que estas envían a sus clientes vía SMS tanto ofreciéndoles nuevos productos y servicios, como informándoles de algunas transacciones realizadas por los mismos.
Recuerde que...
- • El canal de distribución bancaria tradicional por excelencia ha sido la oficina o sucursal, que requiere la presencia física de ambas partes (entidad y cliente) para realizar y formalizar las operaciones bancarias. Este canal está reforzado en las zonas rurales por los corresponsales o colaboradores.
- El desarrollo de las TIC han propiciado la aparición de otros canales relevantes, para algunos casi sustitutivos de la sucursal, para otros simplemente complementarios: Internet, tarjetas, cajeros, TPV, etc.
- • En la banca electrónica se puede consultar productos y servicios, realizar operaciones financieras, así como contratar productos específicos para esta vía.
- • El uso del ordenador y el móvil es cada vez más frecuente para relacionarse con las entidades financieras.