Concepto
Podemos definir el concepto rutina organizativa como aquellos hábitos organizativos que surgen de las experiencias pasadas que ha tenido la organización y conforman la denominada memoria organizativa, condicionando las acciones futuras. Están constituidas por procedimientos, tanto formales como informales, que son aceptados como rutinas de forma no siempre deliberada y que pueden surgir en cualquier nivel jerárquico o parte de la organización, determinando la forma en que se hacen las cosas y los patrones de interacción entre los recursos y capacidades de la organización ante situaciones concretas y repetitivas.
En ocasiones se ha puesto el símil deportivo para explicar en qué consisten las rutinas organizativas. Trazando un paralelismo con las habilidades individuales, un aprendiz de kárate, bajo las órdenes de su maestro, entrena con constancia y atención para aprender las diferentes técnicas. Llegará a ser un experto karateca, cuando esas técnicas aprendidas individualmente, sea capaz de combinarlas de manera adecuada ante una situación real de combate e implementarlas, además, de manera intuitiva y automatizada, sin necesidad de una toma de decisiones consciente: sus conocimientos se han transformado en una “rutina organizativa” que le confiere una gran eficiencia y eficacia a la hora de afrontar las situaciones que el entorno le plantea.
El reto para la dirección de la empresa no se limita a identificar los recursos y capacidades de la empresa, ni siquiera a desarrollarlos a través del aprendizaje organizativo, sino que debe de ser capaz de integrar todos esos recursos y capacidades, muchas veces radicados en individuos o grupos, en un corpus de conocimiento colectivo que, al ser implementado en acciones, devenga en las rutinas organizativas.
Recuerde que...
- • Las rutinas organizativas están constituidas por procedimientos, tanto formales como informales, que son aceptados como rutinas de forma no siempre deliberada.
- • Las rutinas organizativas pueden surgir en cualquier nivel jerárquico o parte de la organización.
- • La dirección debe de ser capaz de integrar esos recursos y capacidades, muchas veces radicados en individuos o grupos, en un corpus de conocimiento colectivo que, al ser implementado en acciones, devenga en las rutinas organizativas.