Por análisis ergonómico cabe entender el estudio de las características de las personas en relación con su puesto de trabajo, para evaluar la adecuación del puesto, el equipo que maneja y el entorno a las características, limitaciones y necesidades de los trabajadores, para tomar decisiones que optimicen la eficacia, confort y seguridad del mismo.
El análisis ergonómico examina una gran variabilidad de aspectos que afectan a la situación del trabajo, y proponen soluciones que se adapten a las fluctuaciones del funcionamiento del hombre y del sistema operativo. Estas soluciones tratan de adaptar las dimensiones del puesto de trabajo al trabajador.
El principal foco se orienta al estudio de las necesidades y capacidades humanas para el diseño de sistemas tecnológicos que aseguren una completa armonía, manteniendo los equipos y las tareas en acuerdo con las características humanas.
Este análisis, si atendemos al momento en el que se aplica, tendrá un fin correctivo o preventivo. En el primero se actúa sobre puestos de trabajo u organizaciones ya existentes, y en el segundo se diseñan o adaptan nuevos puestos de trabajo o estructuras organizativas a las características del trabajador que lo va a ocupar. Por otro lado, el ergónomo, dependiendo del ámbito en el que desarrolle su labor, se especializa en microergonomía, diseñando los puestos de trabajo, o en macroergonomía, realizando un diseño organizacional completo.
La normativa específica que regula algún aspecto de la ergonomía viene constituida por:
Asimismo, en distintos apartados del artículo 15 de la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, se refiere a: "adaptar el trabajo a la persona, en particular en lo que respecta a la concepción de los puestos de trabajo, así como a la elección de los equipos y los métodos de trabajo y de producción, con miras, en particular, a atenuar el trabajo monótono y repetitivo y a reducir los efectos del mismo en la salud"; “tener en cuenta la evolución de la técnica"; "planificar la prevención, buscando un conjunto coherente que integre en ella la técnica, la organización del trabajo, las condiciones de trabajo, las relaciones sociales y la influencia de los factores ambientales en el trabajo".
Otra normativa relacionada con la seguridad en el trabajo es el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo, que en su artículo 3 menciona la obligación del empresario a adoptar las medidas convenientes para que el uso de los lugares de trabajo no perjudique la seguridad y salud de los trabajadores o, en cualquier caso se reduzcan los riesgos al mínimo.
El Real Decreto 1644/2008, de 10 de octubre, establecen las normas para la comercialización y puesta en servicio de las máquinas que tiene por objeto establecer las prescripciones relativas a la comercialización y puesta en servicio de máquinas y su libre circulación dentro de las obligaciones establecidas por la Directiva 2006/62/CE del Parlamento Europeo.
Algunos puntos a tener en cuenta dentro de un análisis de la ergonomía serían los siguientes:
- 1. Las características del entorno de trabajo como temperatura, humedad, sonoridad, luminosidad, calidad del aire, señalización y sus consecuencias para la salud.
- 2. Los datos antropométricos y biomecánicos, es decir, las medidas de los huesos, las amplitudes de los movimientos articulares, etc. con el fin de ver si los equipos de trabajo están adaptados al puesto de trabajo.
- 3. La carga de trabajo físico evaluando el esfuerzo muscular, movimientos repetitivos o posturas forzadas.
- 4. La carga mental de trabajo relacionada con la efectividad de los órganos sensoriales durante el trabajo: visión, vigilancia y atención.
- 5. Los aspectos temporales del trabajo (horarios, pautas, ritmos, etc.).
- 6. El diseño de trabajo, que hace referencia a la forma en que se organizan las tareas o un trabajo entero: qué tareas se hacen, cómo se llevan a cabo y en qué orden se distribuyen.
Debido a la automatización y a la informatización en el ámbito laboral, la tendencia se dirige a estudiar también los aspectos psicológicos y cognitivos, no solo los fisiológicos. Por lo tanto se busca optimizar los sistemas de producción emprendiendo no solo acciones en materia de organización sino también de desarrollo del personal.
En un sentido amplio, los análisis ergonómicos de la actividad del trabajo de las personas pretenden detectar factores que puedan suponer un riesgo y un obstáculo para la producción y la calidad del producto o servicio realizado, disminuir su fatiga e incrementar su satisfacción laboral para la seguridad del personal o para la seguridad en el funcionamiento de las instalaciones.
Actualmente hay que atender al elemento social por su gran incidencia en la conducta de las personas y por tanto con los logros y resultados que obtenga. Esto se traduce en que parte de la ergonomía estudiará la adecuación y ajuste entre las presiones internas y externas originadas por los factores psicosociales o el aburrimiento con el fin de mejorar las condiciones de trabajo y la salud física, mental y social del trabajador.