Es un producto que, estando totalmente terminado, presenta un defecto que la empresa considera subsanable mediante la incorporación de más factores.
La empresa puede adoptar dos soluciones:
- - Venderlo como defectuoso, en cuyo caso, procederá como con la venta de los productos imperfectos.
- - Subsanar el defecto incurriendo en un coste adicional que podrá repartir entre:
- • Todos los productos de la misma gama.
- • Todos los productos fabricados.