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Economía conductal o psicológica

Economía conductual o psicológica

Combinación de la economía con la psicología, para estudiar lo que ocurre en los mercados, analizando el comportamiento del hombre, sus limitaciones humanas y las problemáticas que se originan desde estas limitaciones.

Sistemas constitucionales

Concepto

La economía psicológica, conductual o del comportamiento, nace por la insatisfacción de algunos economistas con la forma con la que se estaban abordando, desde la economía, problemas referentes al comportamiento económico del hombre y con las explicaciones que la economía daba a estos comportamientos. La economía conductual es la combinación de la economía con la psicología, para estudiar lo que ocurre en los mercados, analizando el comportamiento del hombre, sus limitaciones humanas y las problemáticas que se originan desde estas limitaciones.

La economía del comportamiento aplica la investigación científica al conocimiento social, humano, cognitivo y emocional, buscando comprender las decisiones económicas que toman los seres humanos y cómo estas decisiones se ven reflejadas luego en los mercados y en la distribución de los recursos. La economía conductual, principalmente se desarrolla en torno a tres cuestiones:

  • La racionalidad limitada de los seres humanos, consecuencia de las limitaciones cognitivas del hombre, que limita su capacidad para resolver problemas.
  • Una voluntad limitada de los seres humanos, que se encuentra cuando los agentes económicos toman decisiones que no son acordes con sus intereses en el largo plazo.
  • Intereses limitados, por los que en ocasiones los seres humanos toman decisiones económicas en las que sacrifican sus propios beneficios en pro de ayudar a otros.

Los modelos de economía conductual, típicamente integran a su interior la psicología con la teoría económica neoclásica.

Definición

Cuando se revisa la definición más frecuente o popular de economía, en la que esta es expuesta como la ciencia encargada del estudio del comportamiento del hombre en la asignación y distribución de medios escasos, es decir, el estudio del comportamiento humano frente a la riqueza y a la escasez, resulta apenas evidente que una categoría conceptual denominada a sí misma como economía conductual, no versa más allá de lo que es la economía por sí sola. Sin embargo, cuando se revisa la trayectoria del desarrollo teórico de la economía, se encuentra que precisamente han sido los componentes psicológicos del comportamiento humano, los que han sido más simplificados y casi extinguidos de los paradigmas dominantes en economía.

Pero no siempre fue así, durante el período clásico, la economía tuvo una estrecha relación con la psicología, prueba de ello es, por mencionar algún ejemplo, la obra de Adam Smith (1723-1790), titulada "La Teoría de los sentimientos morales", texto que describe los principios psicológicos del comportamiento individual, mientras que otro importante economista, Jeremy Bentham (1748-1832) escribió ampliamente sobre la utilidad de las bases psicológicas.

El distanciamiento entre los economistas y la psicología se evidencia en el desarrollo de la economía neoclásica, pues el interés era configurar a la economía como una ciencia natural, con hipótesis sobre el comportamiento humano que permitieran deducir el comportamiento económico. Se desarrolla a partir de este interés, el concepto del Homo economicus con una entidad psicológica racional, aunque autores como Francis Edgeworth (1845-1926), Vilfredo Pareto (1848-1923), Irving Fisher (1867-1947) y John Maynard Keynes (1883-1946), hacen referencia en sus obras a la relevancia del componente psicológico en las decisiones económicas del hombre.

La discusión económica en el siglo XX, se lleva a cabo sin incluir a la psicología, sin embargo autores como el francés Gabriel Tarde (1843-1904), el estadounidense George Katona (1901-1981) y Laszlo Garai (1935), comienzan a plantear la economía psicológica y la psicología económica, y al tiempo que las teorías de la utilidad esperada y los modelos basados en un hombre económico racional empiezan a ganar una amplia aceptación, las contrastaciones de dichos modelos, hipótesis y teorías, dejan al descubierto una serie de anomalías, específicamente en la toma de decisiones bajo incertidumbre y el consumo intertemporal.

Estas anomalías, halladas en experimentos y en observaciones de la realidad, pronto impugnaron las hipótesis dominantes sobre el hombre racional y la utilidad esperada. Conjuntamente, durante la década de los sesenta la psicología cognitiva, de modo complementario a los modelos conductistas, empezó arrojar más luz sobre el cerebro, como un dispositivo de procesamiento de la información. Psicólogos en este campo, como Ward Edwards (1927-2005), Amos Tversky (1937-1996) y Daniel Kahneman comenzaron a comparar sus modelos cognitivos de toma de decisiones bajo riesgo e incertidumbre contra los modelos económicos de comportamiento racional.

En la historia de la economía del comportamiento, también debe hacerse referencia a la teoría de la racionalidad limitada del Premio Nobel Herbert Simon (1916-2001), quien postuló que las personas, cuando tomamos decisiones económicas no estamos optimizando, como propone la teoría económica neoclásica, en cambio estamos satisfaciendo. Otro destacado precursor de la moderna economía de comportamiento es Maurice Allais (1911), cuya "paradoja de Allais" representa un desafío fundamental a principios de la utilidad esperada. Precisamente Daniel Kahneman y Amos Tversky destacan en ésta disciplina, por profundizar y dar nuevas dimensiones a las ideas de racionalidad acotada iniciada por Herbert Simon y por analizar las violaciones a la utilidad esperada expuestas desde 1952 por Maurice Allais.

En Rational Choice and the Framing of Decisions (1987), Kahneman y Tversky, analizan el proceso de selección en condiciones inciertas, distinguiendo dos aspectos; en primer lugar, la estructuración de los eventos tendrá la representación mental de ellos y, en segundo lugar, una fase de valoración. En este proceso de representación mental, se resalta el marco (framing) en el cual el individuo coloca la elección y que, a igualdad de todas las condiciones, determina un comportamiento diferente. La representación mental de los eventos se transforma en un punto crucial de la decisión. Demuestran en numerosos experimentos, cómo un individuo muestra una actitud diferente ante el riesgo según el contexto en que se sitúa.

Estudio

Uno de los ejercicios más característicos de los experimentos realizados por Tversky y Kahneman consiste en enfrentar estudiantes universitarios a los siguientes problemas:

Problema I. Supongamos ser más rico en 300 dólares de lo que se es hoy.

Se debe elegir entre:

  • 1. Una ganancia segura de 100 dólares.
  • 2. Una probabilidad de un 50 % de obtener 200 dólares y una probabilidad de 50 % de no obtener nada.

Problema II. Supongamos ser más rico en 500 dólares de lo que se es hoy.

Se debe elegir entre:

  • 1. Una pérdida segura de 100 dólares.
  • 2. Una probabilidad de un 50 % de no perder nada y una probabilidad de 50 % de perder 200 dólares.

La mayoría de los individuos analizados se inclinaron en el problema I. Por la elección 1, que representa una ganancia segura, mientras que efectuada la elección favorable al riesgo, se inclina por la elección 4 del problema II.

Se observa que la mayoría de los individuos, optan por los escenarios 1 y 4, y contradicen con su comportamiento a la teoría de la utilidad esperada, en particular, el axioma de la independencia. Ambos problemas, en términos de la utilidad esperada, son el mismo problema.

La riqueza a disposición del sujeto, luego de que la elección haya sido efectuada es:

  • Problema I.
    • Caso 1: 400 dólares con una probabilidad del 100 %.
    • Caso 2: 300 dólares con una probabilidad igual a 50 % o 500 dólares con una probabilidad igual al 50 %.
  • Problema II.
    • Caso 3: 400 dólares con una probabilidad del 100 %.
    • Caso 4: 300 dólares con una probabilidad igual a 50 % o 500 dólares con una probabilidad igual al 50 %.

Lo que se puede concluir, de este simple pero muy diciente ejercicio, es que los individuos participantes en condiciones de incertidumbre tienden a evitar el riesgo, cuando se está en condiciones de ganancia. Sin embargo, cuando se está en condiciones de pérdida, son buscadores de riesgo. Estas situaciones se encuentran en dos escenarios diferentes, pero en términos de la utilidad esperada es uno solo, en consecuencia en términos de la utilidad esperada los participantes deberían tener la misma posición frente al riesgo, tanto si están en situación de ganancia como si lo están en situación de pérdida.

Este efecto marco no solo influye sobre el tema de la utilidad esperada, según Tversky y Kahneman, —sino sobre prácticamente todos los modelos de elección basados sobre otras teorías normativas—.

Los críticos de la economía del comportamiento, que los resultados y las conclusiones que se sacan de los experimentos realizados en esta disciplina, no son extrapolables o aplicables a situaciones reales de mercado y aluden a que solo se analizan en estos ejercicios los procesos de toma de decisiones y no el comportamiento económico general. Los economistas siguen siendo escépticos en cuanto a la metodología utilizada para llevar a cabo estos experimentos y en cuanto a las conclusiones extraídas.

Sin embargo, los economistas conductuales se defiende alegando que los experimentos se han realizado en diversas situaciones y en diversos contextos y aún así, siguen presentándose las anomalías ya referenciadas. Asimismo argumentan que los modelos neoclásicos, a menudo, fallan al predecir los resultados en contextos del mudo real, así que los avances en el campo del comportamiento pueden ser utilizados para actualizar las ecuaciones neoclásicas, pues los economistas conductuales han notado que estos modelos revisados no solo alcanzan correctamente las mismas predicciones que los modelos tradicionales, sino que también predicen correctamente algunos resultados en los cuales los modelos tradicionales fallan.

Recuerde que...

  • Se desarrolla en torno a tres cuestiones: racionalidad, voluntad e intereses limitados de los seres humanos.
  • Racionalidad limitada, consecuencia de las limitaciones cognitivas del hombre, que limita su capacidad para resolver problemas.
  • Voluntad limitada, cuando los agentes económicos toman decisiones que no son acordes con sus intereses en el largo plazo.
  • Intereses limitados, se toman decisiones económicas en las que sacrifican los propios beneficios en pro de ayudar a otros.

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