¿Qué es un agente químico?
Un agente químico es todo elemento o compuesto químico, ya sea por sí solo o mezclado, tal como se presenta en estado natural o es producido, utilizado o vertido, incluido el vertido como residuo, en una actividad laboral. Esto incluye tanto los productos elaborados de manera intencional como aquellos que no lo son, y tanto los comercializados como los no comercializados.
La definición de agente químico se encuentra recogida en la legislación española, específicamente en el Real Decreto 374/2001, que regula la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores contra los riesgos relacionados con los agentes químicos durante el trabajo.
Existen millones de productos químicos, y muchos de ellos son peligrosos para nuestra salud. Podemos encontrarlos en forma de sustancias simples (Ej. gasolina, cloro, ácido sulfúrico, amianto, etc.) o mediante mezclas o disoluciones de dos o más sustancias llamados, también, preparados.
Cuando las condiciones de trabajo son malas, deficientes y/o adversas, bien por un diseño inadecuado o bien por un desarrollo o implantación en la organización, interaccionan con las expectativas, necesidades, capacidades y/o actitudes de los trabajadores, impactan negativamente sobre su seguridad, salud y bienestar, convirtiéndose entonces en una fuente de riesgo que es preciso gestionar.
Estos llamados factores de riesgo habrá que evaluarlos e intervenir sobre ellos mediante una adecuada planificación preventiva para eliminarlos, reducirlos y/o controlarlos.
¿Qué se entiende por riesgo causado por agentes químicos?
Este tipo de riesgo se refiere a la posibilidad de que un trabajador sufra un daño derivado de la exposición a estos agentes en su lugar de trabajo. La exposición a agentes químicos puede ocurrir principalmente por inhalación, contacto dérmico o ingestión accidental. Los efectos adversos de estos agentes pueden variar desde irritaciones leves hasta enfermedades graves como cáncer, dependiendo de la naturaleza del agente químico, la concentración y el tiempo de exposición.
Para gestionar estos riesgos, la normativa establece la necesidad de evaluar y controlar la exposición a agentes químicos, adoptando medidas preventivas y de protección adecuadas. Esto incluye la sustitución de agentes peligrosos por otros menos nocivos, la implementación de sistemas de ventilación y la utilización de equipos de protección individual (EPI) cuando sea necesario (véase: Equipos de protección individual (EPI)). Además, es fundamental la formación e información a los trabajadores sobre los riesgos y las medidas de seguridad a adoptar.
Los riesgos que tienen causa en agentes químicos pueden ser de muchos tipos. Pueden generar riesgos de incendios, explosiones, intoxicaciones, hasta enfermedades profesionales.
La presencia de un agente químico en el lugar de trabajo puede ocasionar daños en tres situaciones básicas: a) existe exposición al agente (por ejemplo: vapor de un producto tóxico presente normalmente en el ambiente), b) es posible, accidentalmente, la exposición al agente (por ejemplo: salpicadura de un producto corrosivo, escape al ambiente de un gas tóxico), c) sin que exista exposición al agente (por ejemplo: incendio o explosión de un producto inflamable o explosivo).
Evidentemente, al hablar de riesgo causado por agentes químicos, debemos mencionar los agentes químicos peligrosos, que son aquellos que cumplen los criterios establecidos en la normativa sobre notificación de sustancias nuevas y clasificación, envasado y etiquetado de sustancias peligrosas, esté el agente clasificado o no en dichas normativas, excepto aquellos agentes que únicamente cumplen los requisitos para su clasificación como peligrosos para el medio ambiente.
¿Cuáles son los agentes químicos peligrosos?
Los agentes químicos peligrosos son aquellos elementos o compuestos químicos que, debido a sus propiedades fisicoquímicas, químicas o toxicológicas, pueden representar un riesgo para la seguridad y salud de los trabajadores. Estos agentes pueden estar presentes en el lugar de trabajo en diversas formas, como gases, vapores, aerosoles, líquidos o sólidos, y pueden causar daños a través de diferentes vías de exposición, como la inhalación, el contacto dérmico, la ingestión o la vía parenteral.
La normativa española, específicamente el Real Decreto 374/2001, establece las disposiciones mínimas para la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con los agentes químicos peligrosos. Este decreto obliga a los empresarios a identificar y evaluar los riesgos asociados a estos agentes y a implementar medidas preventivas adecuadas para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores.
Entre los agentes químicos peligrosos deberíamos distinguir dos clases:
Sustancias: los elementos químicos y sus compuestos, en estado natural u obtenidos mediante cualquier proceso, incluso en aquellos casos en que lleven incorporados los aditivos necesarios para su estabilidad o vayan acompañados de impurezas resultantes del proceso de obtención. Se excluyen los disolventes que puedan separarse sin afectar a su estabilidad ni modificar su fórmula o composición, y Preparados: las mezclas formadas por dos o más sustancias.
Los agentes químicos peligrosos (sustancias y preparados) son aquellos que por sus características pueden dañar directa o indirectamente a las personas, los bienes y/o al medio ambiente. Un preparado es peligroso cuando contenga al menos una sustancia peligrosa. Las sustancias y los preparados que se consideran como peligrosos, según el riesgo que representan, se clasifican en tres grupos básicos:
- A) Por los riesgos a consecuencia de sus propiedades fisico-químicas
- a) Explosivos: En estado sólido o líquido pueden reaccionar al alcanzar determinadas condiciones explosionando.
- b) Carburentes: Los que en contacto con otras sustancias reaccionan inflamándose o explosionando
- c) Extremadamente inflamables: Los líquidos con punto de inflamación inferior a 0º C y los gases inflamables en el aire a temperatura y presión normales.
- d) Fácilmente inflamables: Gases inflamables en el aire a temperatura ambiente sin aporte de energía, sólidos inflamables tras breve contacto con fuente de inflamación, líquidos con punto de inflamación menor a 21º C, y otros que en contacto con agua o aire desprendan gases extremadamente inflamables en cantidad peligrosa.
- e) Inflamables: Punto de inflamación a partir de 21ºC y hasta 55ºC.
- B) Por los riesgos para la salud humana
Las vías de penetración de los contaminantes químicos en el organismo pueden ser:
- a) Vía respiratoria a través del aire que se respira por la nariz y la boca hasta los pulmones.
- b) Vía digestiva a través de la boca o mucosidades.
- c) Vía parenteral, es decir, por las heridas, llagas, etc., hasta la sangre.
Efectos que producen lesiones:
Los productos químicos que resultan tóxicos a las personas, pueden provocar distintos efectos en el organismo tales como: 1) Corrosivos, destruyendo los tejidos sobre los que actúa el toxico, 2) Irritantes: que irritan la piel o las mucosas, 3) Neumoconióticos: que alteran los pulmones, 4) Asfixiantes: alteran la respiración, 5) Anestésicos y narcóticos: alteran el sistema nervioso central, 6) Sensibilizantes: provocan con su presencia alergias y asma, 7) Cancerígenos, mutógenos, teratógenos, 8) Sistémicos.
Se pueden distinguir efectos agudos (cuando se presentan al poco tiempo de la exposición y en forma intensa) y efectos crónicos (cuando se presentan con cierta posterioridad a la exposición y difíciles de relacionar con la causa). También se pueden clasificar los efectos en reversibles e irreversibles.
En función de su capacidad de acumulación se aprecian tres tipos de efectos: acumulativos (aquellos que no se eliminan o lo hacen muy lentamente), parcialmente acumulativos (se acumulan lentamente pero se pueden eliminar tras largo tiempo sin exposición) y no acumulativos (se eliminan rápidamente).
- C) Por los riesgos para el Medio Ambiente.
Se consideran sustancias o preparados peligrosos para el medio Ambiente si en contacto con éste presentan o pueden presentar un peligro inmediato o futuro para algún componente de los ecosistemas.
Se clasifican en agentes químicos peligrosos para el medio ambiente acuático y en peligrosos para el medio ambiente no acuático, siendo dentro de estos últimos las categorías de: tóxicos para la flora, tóxicos para la fauna, tóxicos para los organismos del suelo, tóxicos para las abejas, de efectos negativos a largo plazo y peligrosos para la capa de ozono.
Todos los factores de riesgo habrá que evaluarlos, para intervenir sobre ellos mediante una adecuada planificación preventiva que lleve a eliminarlos, reducirlos y/o controlarlos.
¿En que consiste la evaluación de riesgos por agentes químicos?
La evaluación del riesgo químico es un proceso fundamental para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores expuestos a agentes químicos peligrosos en el lugar de trabajo (véase: Evaluación de riesgos laborales). Según el artículo 3 del Real Decreto 374/2001, el empresario debe determinar si existen agentes químicos peligrosos en el lugar de trabajo y, en caso afirmativo, evaluar los riesgos para la salud y seguridad de los trabajadores. La evaluación debe considerar varios factores, entre ellos:
- • Propiedades peligrosas de los agentes químicos: Se debe analizar la información proporcionada por el proveedor, incluyendo la ficha de datos de seguridad y cualquier otra fuente de información accesible.
- • Valores límite ambientales y biológicos: Es necesario comparar las concentraciones de los agentes químicos en el aire con los valores límite establecidos.
- • Tipo, nivel y duración de la exposición: Analizar cómo y cuánto tiempo están expuestos los trabajadores a los agentes químicos.
- • Condiciones de trabajo: Considerar cualquier otra condición que influya en los riesgos, como peligros de incendio o explosión.
- • Medidas preventivas: Evaluar el efecto de las medidas preventivas adoptadas o que deban adoptarse.
- • Vigilancia de la salud: Tener en cuenta los resultados de la vigilancia de la salud de los trabajadores y los accidentes o incidentes relacionados con la presencia de agentes químicos.
La evaluación debe incluir todas las actividades que puedan suponer un riesgo, como las de mantenimiento o reparación, y debe mantenerse actualizada, revisándose periódicamente o cuando cambien las condiciones de trabajo.
Evaluados los riesgos químicos, habrá que intervenir sobre ellos mediante las acciones derivadas de una adecuada planificación preventiva para eliminarlos, reducirlos y/o controlarlos.
¿Qué es la planificación preventiva de los riesgos químicos?
La planificación preventiva de los riesgos químicos es un proceso esencial dentro del plan de prevención de riesgos laborales de una empresa. Según el artículo 16 de la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, la prevención de riesgos debe integrarse en el sistema general de gestión de la empresa y abarcar todas sus actividades y niveles jerárquicos.
La planificación preventiva incluye la evaluación inicial de los riesgos para la seguridad y salud de los trabajadores, teniendo en cuenta la naturaleza de la actividad, las características de los puestos de trabajo y de los trabajadores que los desempeñan. En el caso de los riesgos químicos, esta evaluación debe considerar la elección de equipos de trabajo, sustancias o preparados químicos y el acondicionamiento de los lugares de trabajo.
Si la evaluación preventiva revela situaciones de riesgo, el empresario debe realizar las actividades preventivas necesarias para eliminar, reducir y controlar dichos riesgos. Estas actividades deben ser planificadas, especificando plazos, responsables y recursos necesarios para su ejecución. Además, el empresario debe asegurarse de la efectiva ejecución de estas actividades mediante un seguimiento continuo.
Los riesgos para la salud y la seguridad de los trabajadores, a través de las medidas especificas de prevención y protección que determina la legislación, se reducirán al mínimo o se eliminarán mediante: a) la concepción y organización de los sistemas de trabajo, b) la selección e instalación de los equipos de trabajo; c) los procedimientos adecuados para el uso y mantenimiento de los equipos utilizados para trabajar con agentes químicos peligrosos o con residuos que los contengan, incluidas la manipulación, el almacenamiento y traslado de los mismos; d) la adopción de las medidas higiénicas adecuadas, personales y de orden y limpieza; e) la reducción al mínimo de cantidades de agentes químicos peligrosos ajustadas a cada tipo de trabajo; f) la reducción de la exposición al mínimo número de trabajadores; g) la reducción al mínimo de la duración e intensidad de las exposiciones.
Cuando la evaluación de riesgos ponga de manifiesto la existencia de algún riesgo para la salud de los trabajadores, el empresario deberá realizar una vigilancia de la salud de los posibles afectados, previa información a dichos trabajadores, y conforme los protocolos procedimentales del Reglamento de los Servicios de Prevención.
El empresario deberá planificar las actividades para afrontar posibles accidentes, incidentes o emergencias debidas a la presencia de agentes químicos peligrosos en el lugar de trabajo, mediante la instalación de medios necesarios para el control del peligro, la evacuación y primeros auxilios del personal. Se formará a los trabajadores afectados, y se realizarán prácticas de seguridad regularmente. Se organizará la coordinación con servicios externos, y estará disponible la información sobre medidas de emergencia, sistemas de aviso y comunicación, incluso por incremento del riesgo.
Recuerde que…
- • Agente químico es todo elemento o compuesto químico, ya sea por sí solo o mezclado, tal como se presenta en estado natural o es producido, utilizado o vertido, incluido el vertido como residuo.
- • El riesgo produido por un agente químico es la posibilidad de que un trabajador sufra un daño derivado de la exposición a estos agentes en su lugar de trabajo.
- • Los agentes químicos peligrosos son aquellos elementos o compuestos químicos que pueden representar un riesgo para la seguridad y salud de los trabajadores.
- • La evaluación del riesgo químico es un proceso fundamental para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores expuestos a agentes químicos peligrosos en el lugar de trabajo.
- • La planificación preventiva de los riesgos químicos implica que el empresario debe realizar las actividades preventivas necesarias para eliminar, reducir y controlar los riesgos previamente evaluados.