Concepto
La tecnología blockchain combina una serie de tecnologías que permiten gestionar datos mediante registros, en lo que se denominan cadenas de bloques, de forma distribuida entre todos los miembros de la red, lo cual permite garantizar que esos registros no puedan ser alterados.
Más detalladamente, la tecnología blockchain es un sistema de registro que utiliza un sistema equivalente a un libro contable o base de datos distribuida, descentralizada, compartida y replicada, que puede ser pública o privada, permisionada (accesible solo a los que son admitidos, como ocurre con una blockchain privada o cerrada) o no permisionada (accesible libremente a cualquier usuario) y basada en tokens cripto-económicos, o bien sin tokens. Los datos registrados en el libro o base de datos contable deben ser inmutables, auditables, protegidos criptográficamente y deben estar dotados de sistema de verificación de que son verdaderos.
Blockchain es conocido como el Internet del Valor frente al Internet de la Información, que es el sistema actual de Internet. Permite enviar valor o activos digitalizados entre los usuarios frente a Internet clásico, que solo permite enviar información.
Es una tecnología de base colaborativa en la que son los denominados “nodos” de la red los que actúan como verificadores de la veracidad de las operaciones o transacciones, por ejemplo, de la transferencia de activos o de criptomonedas, o de activos reales o digitales que intercambian empresas o personas a través de estas redes de blockchain.
Por tanto, esta tecnología funciona como un sistema de registro o de libro mayor -pero distribuido- que almacena las transacciones que se van realizando en forma de bloques de información, que son verificados por los miembros de la Red y añadidos a la cadena de bloques de forma lineal.
Por otra parte, hay varios sistemas operativos que trabajan con blockchain; así, cabe destacar Etherum, que está formado por muchos ordenadores distribuidos por todo el mundo y que forman una especie de plataforma sobre la que se pueden mover o desarrollar muchas aplicaciones concretas.
Se está desarrollando en todo el mundo la infraestructura que permitirá el desarrollo de sus aplicaciones. Así, en España, procede citar el Consorcio ALASTRIA, de carácter nacional, semipúblico y multisectorial, en el que participan la mayoría de las empresas del IBEX 35, consultoras, reconocidos despachos de abogados y diversas universidades e instituciones.
Elementos de un sistema de tecnología blockchain
Los principales elementos de un sistema blockchain son los siguientes:
- — Las Cadenas de Bloques, donde se anotan las transacciones que se realizan en la red. Los bloques están enlazados linealmente entre sí, mediante apuntadores hash (que es una dirección criptográfica), formando una cadena. Cada bloque es como una página de un libro contable prácticamente infinito y en el que todo lo que se ha escrito ya no puede borrarse ni repetirse, pues cada transacción tiene una huella digital única; todo esto es lo que llaman inmutabilidad.
- — Los Nodos, que son ordenadores que almacenan la copia del libro contable, es decir, almacenan la cadena de bloques.
- — Las Carteras Digitales o Wallets, que son aplicaciones o interfaces a través de las cuales los usuarios hacen las transacciones y gestionan su Identidad Digital para poder operar.
- — Los llamados Mineros, que son ordenadores que autorizan que se vayan añadiendo bloques a la cadena y, para ello, deben resolver un problema matemático llamado Protocolo de Consenso. Por ese esfuerzo (que supone tener gran capacidad de computación y utilizar mucha energía) reciben recompensas en moneda digital que proceden de las comisiones que pagan los que realizan las transacciones. En las criptomonedas la minería puede utilizar principalmente sistemas de prueba de trabajo (Proof of Work - PoW) o de Prueba de Participación (Proof of Stake - PoS). Hay incluso minería en la nube (Cloud Minning), pues los usuarios pueden alquilar capacidad de minado durante un tiempo sin tener equipos propios.
Una transacción común en blockchain comienza con el envío de un activo digital de una cartera digital o wallet a otra. Esta transacción es vista por diversos nodos y agrupada con otras transacciones. Este grupo de transacciones se envía seguidamente a los mineros como un trabajo que tienen que resolver a cambio de una recompensa. Los mineros reciben así un encargo que puede ser distinto para cada grupo de mineros dependiendo del nodo que lo haya propuesto; y compiten entre sí por conseguir lo que se llama un valor (nonce) que resuelve un acertijo o reto matemático que autoriza al minero que lo encuentra a proponer su bloque con las transacciones que contiene, para ser agregado a la cadena de bloques. Este bloque propuesto incluye también la identificación del bloque anterior y un valor de emisión de monedas por parte de la red (la recompensa), las cuales llegan a la cartera del minero ganador por haber resuelto con su capacidad de cálculo el reto o acertijo matemático.
Aplicaciones en modelos de negocio
Como se ha indicado, la cadena de bloques puede ser pública o cerrada y en función de ello puede ser consultada por los miembros. No hay una copia única, sino que cada nodo almacena una copia, por lo que no hay intermediarios y el sistema es inalterable y transparente.
Esta característica de sistema distribuido, en lugar de sistema centralizado, es lo que puede cambiar muchos modelos de negocio.
La primera aplicación real de la tecnología blockchain se realizó con las llamadas criptomonedas, concretamente con la conocida Bitcoin. Su origen se encuentra en el artículo del año 2008 de Satoshi Nakamoto (aunque no está clara su identidad real).
La tecnología blockchain tiene innumerables aplicaciones, si bien su origen y mayor desarrollo hasta la fecha está teniendo lugar en el ámbito financiero, particularmente en una parte del denominado sector Fintech (Finanzas Tecnológicas).
Esta característica de la distribución frente a la centralización es lo que puede cambiar muchos modelos de negocio. Así, por ejemplo, las conocidas plataformas como Uber, Airbnb, Amazon, agencias de viajes on line y todos los portales de compraventa o de intercambio de productos o servicios que hay actualmente en Internet son sistemas centralizados cuyo negocio es la comisión que cobran por poner en contacto a los que venden con los que compran. Estos modelos pueden cambiar en los próximos años mediante estas nuevas tecnologías que permiten el contacto director entre compradores y vendedores sin pasar por esos intermediarios.
Cabe indicar algunas opciones de uso, muchas de las cuales se están aplicando ya y otras están en fase de pruebas.
- — Criptomonedas, que han sido las pioneras. Aquí es fundamental poder transferir valor sin que una unidad digital se pueda gastar dos veces, dado que se registra cada transacción una única vez y de forma inalterable; así destaca el caso de Bitcoin.
- — Mercados de valores, como por ejemplo el sistema blockchain que utiliza el NASDAQ (Índice de Bolsa de las empresas tecnológicas de EE. UU.).
- — Almacenamiento en la nube distribuido, es decir, se pueden guardar datos en la red concreta que se utilice de blockchain, pues están distribuidos en todos los ordenadores que la utilizan y se almacena una copia idéntica en todos los nodos.
- — Privacidad en Internet, dado que sería una forma de descentralizar los DNS que ahora son de Gobiernos o grandes empresas, por lo que sería una forma de evitar posible espionaje.
- — Gestión de identidades, pues dicen los expertos que las ID de blockchain pronto reemplazaran a los usuarios y contraseñas y la firma digital.
- — Mercado eléctrico, de modo que los que generan particularmente electricidad con energías renovables en su propia casa pueden vender sus excedentes sin intermediarios.
- — Sistemas de votaciones electrónicas, pues con blockchain se garantiza que una persona solo pueda votar una vez y sería electrónico, por lo que se podrían hacer más elecciones y mucho más baratas.
- — Contratos inteligentes (Smartcontracts), que son programas informáticos digitales automatizados, como se ha indicado antes. También se pueden utilizar aplicaciones descentralizadas (Dapps) con infinitas posibilidades. La plataforma descentralizada Ethereum es la más famosa para estos contratos.
- — Sistemas de seguridad, pues se pueden crear contratos inteligentes que funcionen como cerraduras inteligentes que solo permitan acceso a los que están autorizados.
- — Ocio y entretenimiento, pues se puede aplicar sistemas de reservas de viajes, de restaurantes, compra de entradas e incluso videojuegos o juegos de azar, pues las recompensas son rápidas y transparentes.
- — Comercio electrónico, mediante plataformas de compra y venta pero con moneda virtual y blockchain sin que haya comisión del intermediario. Si se trata de música, ya hay músicos y cantantes que están concediendo licencias de uso de su música y recibir el pago sin intermediarios; también pueden hacerlo escritores o periodistas, cobrando micropagos por sus aportaciones.
- — Aplicaciones militares y de inteligencia, pues pueden tener sistemas de mensajerías seguros e indescifrables, bloqueo o desbloqueo automático de armas, uso de vehículos militares, etc.
- — Sistemas de pago, ya que aporta seguridad y velocidad.
- — Alquileres e intercambios de la economía colaborativa, por ejemplo, para viviendas o para coches compartidos.
- — Registros y servicios de Notaría, gracias a que blockchain es una especie de gran registro distribuido (todos los nodos tienen copia) al que muchas partes pueden acceder desde cualquier lugar del mundo. Se puede registrar cualquier cosa y por ello es muy útil para registro de documentos, actas, activos, derechos de autor, registros de nacimiento, de divorcios, de defunciones, registros de propiedad, registro de vehículos, expedientes médicos. También se pueden registrar obras de arte para evitar falsificaciones.
- — Autentificación de aportaciones, tanto para empresas en forma de financiación (como es el caso de las operaciones de ICO - Initial Currency Offer) o fondos para proyectos solidarios o de caridad. Así, por ejemplo, con esta tecnología se puede comprobar que los donativos llegan directamente a las personas o instituciones que tienen que recibirlas sin el peligro de su mala gestión por parte de intermediarios privados o del Gobierno.
- — Trazabilidad de mercancías y cadena de suministros. Se puede añadir una huella digital a cada mercancía para conocer cómo se transforma o por qué fases de producción o de recorrido ha pasado. Así, se pueden certificar denominaciones de origen, ver el recorrido de una mercancía por todo el mundo, quién la ha manipulado, etc. Muchas empresas de supermercados y del sector textil están ya trabajando en esta idea. Con la llegada del Internet de las Cosas (IoT) se podrá conectar un contrato con un GPS para que así se pague al proveedor en cuanto llegue al destino la mercancía. También se puede aplicar para un renting de un coche, de modo que solo si el usuario ha pagado la cuota podrá arrancarlo y conducirlo; y si, además, el coche fuese autónomo, el mismo coche regresaría autónomamente a su empresa si el cliente no ha pagado.
Recuerde que...
- • Blockchain es conocido como el Internet del Valor.
- • La tecnología blockchain combina una serie de tecnologías que permiten gestionar datos mediante registros, en lo que se denominan cadenas de bloques, de forma distribuida entre todos los miembros de la red, lo cual permite garantizar que esos registros no puedan ser alterados.
- • Los principales elementos de un sistema blockchain son: las cadenas de bloques, los nodos, las carteras digitales o wallets y los ordenadores llamados mineros.
- • La cadena de bloques puede ser pública o cerrada y en función de ello puede ser consultada por los miembros. No hay una copia única, sino que cada nodo almacena una copia, por lo que no hay intermediarios y el sistema es inalterable y transparente.
- • La tecnología blockchain tiene innumerables aplicaciones, aunque su mayor desarrollo está en el ámbito financiero, particularmente en una parte del denominado sector Fintech (Finanzas Tecnológicas).