Sistemas electorales proporcionales

Los sistemas electorales proporcionales o de fórmula proporcional o de representación proporcional, propios de la democracia contemporánea de masas, son la alternativa a los mayoritarios. Se fundan en la concepción del Parlamento como el espejo fiel de las opciones de la ciudadanía y pretenden establecer, sino una identidad sí al menos la más aproximada igualdad, y peso, de todos los votos emitidos por los electores. Consisten, como señalan Cotteret y Emeri, en atribuir a cada partido un número de mandatos o escaños proporcional a su fuerza numérica, si bien nunca es factible alcanzar la exacta y matemática proporcionalidad sino una aproximación tendencial a la misma, en función asimismo de otros factores determinantes como el tamaño de los distritos o el número de diputados a elegir en cada uno. Cabe concluir que la opción por unos u otros depende de la historia y tradición de cada país.

Los sistemas electorales proporcionales pueden aplicarse en colegios uninominales, con la finalidad de combinar la representación proporcional con el mayor acercamiento entre electores y elegidos. El método aplicable más conocido es el de voto único transferible ideado por Andrae y Hare conforme al cual si bien cada elector tiene únicamente un voto, éste es transferible si su candidato ha obtenido más votos de los necesarios para resultar electo, de manera que el elector debe indicar primeras, segundas, terceras, etc. preferencias. Se la conoce también como "quota system" y se aplica en Irlanda para elegir la Cámara Baja o Dail y del mismo señala Fisichella que es el más proporcional entre las fórmulas proporcionales (véase "Voto único transferible").

No obstante los sistemas proporcionales son propios de los distritos plurinominales en los que son varios los escaños a cubrir, y por tanto concurren una pluralidad de listas, que pueden ser cerradas y bloqueadas, semilibres o abiertas. En los sistemas proporcionales de listas concurrentes el mecanismo básico consiste en determinar una cuota o cociente sobre el total de votos, de manera tal que los escaños son asignados de acuerdo con los cocientes obtenidos. Entre los métodos aplicables cabe citar:

• 1. La fórmula del resto más amplio, en la que calculando el cociente electoral se dividen los votos obtenidos por cada partido por el cociente, atribuyendo tantos escaños como veces se alcanza el cociente. Si aún restan escaños por cubrir se asignan a los restos más elevados. Una variante de esta fórmula es la de Dietz o de media más elevada;
• 2. La fórmula D´Hondt o de la cifra repartidora o de los mayores cocientes (véase "D´Hondt");
• 3. La variante Santa Lagüe, método de igualación o del número impar, que se utiliza en los países escandinavos. En lugar de dividir los votos por 1, 2, 3, etc., como en el D´Hondt, se dividen por números impares: 1; 3; 5; 7, etc., con lo que se aumenta el margen entre los cocientes, disminuyéndose así los beneficios para los partidos mayores;
• 4. La variante Hagenbach Bischof, o del cociente progresivamente rectificado, aplicada en Suiza. La cuota electoral se obtiene dividiendo el total de votos emitidos por el número de escaños más uno. A continuación del total de votos de cada partido es dividido por el cociente resultante, resultando el número de escaños de cada uno. Si tras la operación no quedan asignados todos los escaños, ha de rectificarse la cuota dividiendo el total de votos por el número de escaños más dos.